El 30% de los niños españoles sufre obesidad o sobrepeso. Algo ha cambiado. España ha pasado de ser un referente en nutrición a ocupar el segundo puesto en el ranking de obesidad infantil en Europa, sólo por detrás del Reino Unido.¿Qué estamos haciendo mal?, es la pregunta que más se repiten los padres y educadores. Para añadir más peso al problema, los menores cada vez pasan más horas ante el ordenador, la "play" o la televisión y se mueven menos, con lo que el balance de entrada y salida de calorías tiene un claro superávit que se resuelve con el almacenamiento de calorías en forma de grasa.Con todo ello el panorama que se presenta no es nada alentador. Por primera vez en los últimos 100 años, las estadísticas pronostican a los niños de hoy una esperanza de vida menor que la de sus padres y abuelos. Ha llegado el momento de tomar medidas.Algunos consejos a seguir pueden ayudar a los padres para corregir las rutinas alimenticias de los más pequeños de la casa, y así proteger su salud. No dudes en ponerlas en práctica.Respeta su apetito. No le fuerces a comer, sus raciones son menores.No cambies todo en un día. Ve introduciendo los cambios poco a poco. No hables de dietas o de adelgazar.Manténte fiel a la rutina. Sirve las comidas a las mismas horas.Sé paciente. Preséntale el nuevo alimento varias veces antes de darte por vencida. Háblale de su color, su sabor… Estimula su interés.Hazle partícipe. En el supermercado, pídele ayuda para elegir, invítale a que cocine contigoPredica con el ejemplo. Si te ve comer fruta tiene muchas más probabilidades de probarla.Planea tus menús y vigila los del colegio para complementarlos.Incluye el máximo de verduras. Si las añades a la pasta, el arroz… evitarás los picos de azúcar.