Si eres una de esas personas que pone miles de pretextos para salir a comer con amigos, ya que los alimentos no cumplen con normas estrictas, puedes tener ortexia
La vida sana siempre va acompañada de una dieta balanceada y saludable, eso es algo que todos los médicos recomiendan y hacerlo, en medida de lo posible, es lo mejor. El problema viene cuando más que cuidado alimenticio, se comienza a transformar en un trastorno, una obsesión. Ahí podríamos comenzar a hablar sobre la ortorexia.
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Este es un término que existe desde el año 2000, con la publicación de “Los yonquis de la comida sana“, del Dr. Steven Bratman. Ahí se habla de las personas que tienen una preocupación extrema por la comida sana a tales niveles que sentían culpabilidad si comían algo que salía de la norma, a veces prefiriendo aislarse o dejar de comer antes de ingerir algo que no cumpliera con sus normas.
¿Qué puede evitar comer alguien que sufre de ortorexia?
Las carnes, las grasas, alimentos que hayan sido cultivados con herbicidas o pesticidas, alimentos que contengan aditivos artificiales como colorantes o conservantes.
No es problema priorizar la comida que mejor le venga a tu organismo. El problema es que esa prioridad, se convierta en el centro de todo y, como señala Bratman, tengas un menú en lugar de una vida.
Es por eso que la ortorexia entra dentro de otros Trastornos de la Conducta Alimentaria, como la bulimia y la anorexia y hay incluso quien señala que en algunos casos la ortorexia es producto de una anorexia mal curada que podría acabar dando lugar a una recaída.
¿Cómo saber si se te fue de las manos y qué hacer?
El Doctor Bratman señala que hay una serie de preguntas que puedes hacerte: ¿Tu conducta alimentaria te aísla socialmente? ¿Te preocupa más la calidad de los alimentos que el placer de comerlos? ¿Conforme aumenta la cantidad de tu alimentación disminuye tu calidad de vida?
Si tienes respuestas positivas y sospechas que requieres ayuda, ponte en manos de un especialista que te ayudará a determinar si sufres o no ortorexia y, en caso afirmativo, podrá ayudarte a que te recuperes de los déficits nutricionales provocados por el rechazo a algunos alimentos (que no son sustituidos con otros que aporten valores nutricionales semejantes) y a controlar la obsesión y trabajar en el aprendizaje.
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Autor: I.S.