A veces los programas de ejercicio y el control de peso no permiten cumplir el deseo de tener un abdomen firme y plano, es allí cuando el paciente comienza a pensar en la posibilidad de someterse a una abdominoplastia. ¿Qué es esto?
La abdominoplastia es una cirugía estética que consiste en retirar el exceso de grasa y piel, haciendo que el abdomen luzca tonificado.
Como toda operación, la abdominoplastia presenta riesgos. Estos son algunos de ellos:
- Durante y después de la cirugía puede haber sangrado.
- Aparecen hematomas, los cuales pueden ser tratados o drenados.
- No se pueden tomar antiinflamatorios, aspirinas y vitamina E en los días previos y posteriores a la operación.
- La operación puede causar náuseas.
- A medida que los tejidos sanan después de la cirugía, puede suceder que la grasa cutánea más profunda llegue a deteriorarse.
- A veces deja cicatrices permanentes. En una persona normal puede tardar hasta 18 meses en desaparecer la marca de la operación.
- Si no se ejercita después de hacerse esta operación, después vuelve a producirse la grasa. ¿No querrás haber gastado dinero por gusto, verdad?
¿Estás pensando en hacerte la abdominoplastia? Si ya te la hiciste, cuéntanos tus experiencias.