¿Alguna vez escuchaste acerca del vaginismo? Si sientes dolor, pinchazos, quemazón o rigidez durante cualquier tipo de penetración vaginal, incluidos el uso de tampones, exámenes ginecológicos o relaciones sexuales, es probable que estés sufriendo de vaginismo aun sin saberlo.
Existe el vaginismo primario y el secundario. ¿Qué son?
Primario: Cuando presenta los síntomas, pero nunca ha tenido relaciones sexuales.
Secundario: Se trata de un acto involuntario (un reflejo) en respuesta a dificultades de índole psicológico, biológico o de relación de pareja.
¿Cómo se puede tratar este problema?
Existen ciertos ejercicios y técnicas de relajación que las mujeres pueden realizar para terminar con las molestias. Los mejores son los famosos ejercicios Kegel, que sirven para fortalecer los músculos del suelo pélvico.
Por otro lado, es recomendable buscar ayuda a través de terapia (general o conductual). Esto es importante para abordar las causas psicológicas del problema.