Cuando hacemos ejercicio es más fácil perder peso en otras partes del cuerpo que en las caderas. No es imposible, pero cuesta. Esto sucede porque es allí donde más se acumula la grasa y sobre todo la celulitis. Aunque la genética también influye, podemos moldear nuestras caderas siguiendo estos consejos.
En primer lugar, una dieta adecuada es esencial, pero debemos combinarla con ejercicios aeróbicos que deberíamos realizar tres veces a la semana durante unos 45 minutos. Con esto reduciremos volumen además de moldear la cadera.
Los masajes también son importantes, es recomendable hacerlos en la ducha para alternar agua fría y caliente. El masaje se debe hacer desde la rodilla y subir hasta la parte externa del muslo, siempre con movimientos circulares. Así activamos la circulación y no retenemos tantos líquidos.