Es el primer paso, el elemento básico del juego sexual y, como todas las técnicas, se puede perfeccionar. El primer beso siempre despierta dudas (¿cómo poner la boca?, ¿qué hacer?) pero no se olvida nunca. Y no sólo por lo placentero que haya podido ser, sino por el recuerdo que nos deja: todo lo que no sabíamos, lo raro que fue o lo mal que salió.Como dice Gabriela Mistral en uno de sus poemas: "Hay besos que pronuncian por sí solos la sentencia de amor condenatoria, hay besos que se dan con la mirada, hay besos que se dan con la memoria". El beso, en definitiva, es la conducta erótica más humana e importante. Algunos datos:- Ciertos estudios indican que dar un beso apasionado todas las mañanas aumenta la felicidad y la resistencia a determinadas enfermedades y prolonga la vida. También nos ayuda a tener una actitud más positiva.- Durante un beso apasionado aumentan los niveles de dopamina (que se asocia con el bienestar) y testosterona (hormona relacionada con el deseo sexual). Se segrega adrenalina, que aumenta la tensión arterial y la frecuencia cardiaca, y se libera oxitocina. El resultado es una experiencia única, que para muchos supera a la sexual.¿CÓMO HAY QUE BESAR?Es algo muy personal, pero:- Hay que dejarse llevar, con amor, sinceridad y entrega. Lo demás se aprende y se perfecciona con el tiempo.- Hay que tener en cuenta a la persona con la que vamos a compartir el beso.- El lugar, en principio, debe ser más privado que público, pero hay opiniones para todo.- Debemos escoger bien el momento e interpretar las señales no verbales: los ojos pueden indicar acercamiento o distancia, por ejemplo.- Hay que cuidar la higiene bucal: compartir el aliento del otro es un acto muy íntimo.- La brusquedad, el precipitarse hacia la boca del otro, suele causar extrañeza y rechazo. En cambio, jugar suavemente con los labios nos prepara para un beso más profundo.- ¿Ojos cerrados o abiertos? Cerrados, nos ayudan a concentrarnos en lo que sentimos: todo lo demás se diluye. Abiertos, nos permiten reconocer la pasión del otro en su rostro y en su mirada.- La intensidad, presión, ritmo… varían y marcan el deseo. La ternura se alterna con la pasión: es como pedir permiso para entrar.- El psicólogo David Coleman recomienda las cuatro "pes": paciencia, presión adecuada, parsimonia y pasión.- El beso pone en acción más de 30 músculos faciales. Es un ejercicio recomendado por los cirujanos plásticos.EVITA MALAS EXPERIENCIASNo hay una única forma correcta de besar; pero es necesario evitar ciertas conductas inadecuadas, que pueden provocar rechazo en la otra persona.El beso apresurado o precipitado no deja respirar a la otra persona. Ocurre cuando interpretamos mal las señales que nos envía y pensamos erróneamente que está lista.El beso que evita el contacto, puede interpretarse como un intento de poner distancia.El beso abrupto, en el que a la otra persona puede parecerle que va a ser "tragada".