El masaje erótico

Caricias eróticas, movimientos sensuales y sensaciones placenteras (y sexuales) son sus cartas de presentación. Bienvenid@ al masaje erótico…

Este masaje tan especial puede entenderse como un juego previo al acto sexual, aunque no es necesario que el fin sea el coito (pero te avisamos que es muy probable que ocurra?).

¿En qué consiste?
A diferencia de los masajes más típicos donde se trabajan los músculos, en el masaje erótico se dan caricias sobre los sentidos, especialmente por las zonas erógenas donde la excitación es mayor.

Los genitales, el ano, la boca, los labios son las zonas donde el masaje alcanzará su climax, aunque es preferible que no te dirijas directamente a esas zonas si quieres que el masaje tenga una duración considerable.

¿Cómo entrar en acción?

Con la pareja tumbada (de espaldas o boca arriba) y dispuesta a dejarse llevar por las sensaciones es el momento de iniciar el masaje.

Un suave recorrido con las manos por todo el cuerpo servirá de toma de contacto, calentará la piel y relajará los músculos agarrotados. A la vez se estimulará todo el sistema linfático y hará más sensibles las terminaciones nerviosas que existen en la piel.

Tras una primera fase de relax, viene la fase de estimulación. Es el momento de ir acariciando zonas más erógenas, realizando suaves movimientos y dejarse llevar por lo que pida el cuerpo?

Pasos para un masaje erótico:

1.- Elige una habitación cálida y cómoda
2.- Desconecta los teléfonos
3.- Coloca unas velas o pon el cuarto a media luz
4.- Una música suave puede ayudar a la relajación
5.- Elige un aceite adecuado: de almendras dulces o de semillas de uva, son una buena elección. Consejo, el de romero es muy estimulante.

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