Reglas de la pareja (1)

Reglas de la pareja (1)

Está claro que todos los sentidos intervienen en los encuentros amorosos. Sólo tenemos que intentar descubrir lo que nos enciende o nos hace reír, recuperar el juego por el juego, sin pensar en los resultados. Entra y descubre cómo puedes evitar que tus relaciones sexuales caigan en la rutina.Cómo evitar la rutina sexualEl juego sexual no es una cuestión de sexos, ya que en una pareja, tanto el hombre como la mujer pueden gozar y tener una respuesta más placentera.Está claro que todos los sentidos intervienen en los encuentros amorosos. Sólo tenemos que intentar descubrir lo que nos enciende o nos hace reír, recuperar el juego por el juego, sin pensar en los resultados.Para excitarse, la mujer necesita preparar tanto su mente como su cuerpo. Y el hombre, a través del juego, recupera la intensidad del encuentro.De todos modos, lo más importante es saber que la sexualidad está en el cerebro. Empieza a pensar en él… y deja que tu sensualidad aflore. Es muy posible que la idea de ver a tu compañero excitado te guste y a él le sucede lo mismo.La importancia de las cariciasA todos nos agradan las caricias y, sin embargo, dejamos que la relación transcurra sola, como si pensáramos que puede funcionar sin dedicarle tiempo. Y eso no suele suceder.Las mujeres valoramos las caricias como si fueran las partes de una novela: con una introducción, un nudo y un desenlace. Queremos acariciar y ser acariciadas en el antes, en el durante y en el después de un encuentro.La caricia tiene importancia en sí misma y no sólo porque es una forma de llegar al éxtasis. Tocarnos, acariciarnos o explorar mil sensaciones no son preludios, son los caminos que nos acercan al placer, al goce y dan el aderezo necesario al amor.Hay libros y revistas que nos dicen, por ejemplo, por dónde podemos empezar, cómo se debe mordisquear el lóbulo de la oreja, qué posturas se pueden emplear para un buen masaje o que caricias nos pueden llevar al éxtasis.Pero lo que debemos tener siempre presente es que nosotros somos nuestros mejores expertos, y que en el juego, el dónde y el cómo lo decide cada uno.Por María Jesús Mañes

juegopareja