Facebook o Twitter se aferran a la vida cotidiana. Su última conquista: `tuitear´ después del sexo. Esta tendencia es inocua para la salud, no quema las sábanas como el cigarrillo de después y es enormemente estimulante para la vanidad. Por eso no extraña que más de una tercera parte de los jóvenes menores de 35 años hayan adoptado este hábito, según una reciente encuesta.Muchos adolescentes confirman que en Tuenti o en el Messenger se está, también o sobre todo, para ligar. Superada cierta edad, la discreción se impone. La gente disfruta su pasión en privado, fuma y calla.Pero hay casanovas que no se conforman con publicar sus conquistas en una red social. Además quieren estampar la huella de su placer en un mapa. En I Just Made Love (Acabo de hacer el amor) se lo ponen fácil. Un clic en el ratón y no te recates. Te preguntan dónde ha sido, con qué tipo de pareja e incluso si fue la primera vez. ¿Qué pensarán las parejas de los vanidosos? `Tuitear´ o escribir en el formulario de las redes sociales es un acto individual. No se comparte con la pareja como el clásico cigarrillo.No te fíesPero no te fíes. Las redes sociales son el gran sustitutivo de casi todo, pero dime de qué presumes y te diré de qué careces, y quizá para los orgullosos de sexo la pregunta de Facebook, “¿Qué estás pensando?”, es más precisa que la de Twitter, “¿Qué estás haciendo?”.