Si eres muy buena maniobrando el pene de tu chico pero no le pones atención a los testículos, estás desaprovechando una fuente de placeres inexplorados.
Antes es importante saber que los testículos están cubiertos por una delgada capa de músculo que se extiende en el abdomen y que tiene miles de terminaciones nerviosas.
Seguramente así como muchas mujeres pensarás que son demasiado sensibles para ser manipulados, lo cual es cierto, pero puedes hacerlo de forma delicada con estas técnicas.
1 El secreto
En primer lugar observa cuidadosamente su escroto. Notarás que hay una articulación en el medio que llega a la base del pene. A lo largo de esta línea hay muchísimas terminaciones nerviosas, entonces, si lo tocas allí, no podrá ni hablar.
Humedece un dedo con saliva (o con un poco de lubricante) y deslízalo hacia arriba y abajo de esta articulación, variando el nivel de presión. Luego, sigue la misma línea con la punta de la lengua.
2 No temas tocarlos
Puedes sostenerlos con la mano en forma de copa y acarícialos suavemente.
3 Usa tu lengua
Comienza con uno y pasa tu lengua todo, arriba y abajo, luego, muévete lentamente hacia el otro con movimientos lineales y en forma de ocho, alternando la parte plana de la lengua y la punta.
4 Durante el orgasmo
Cuando está por llegar al orgasmo, sus músculos se contraen involuntariamente y los testículos se levantan levemente, prolongarás su eyaculación si los bajas suavemente llevándolos a la base mientras está por terminar, o lo opuesto si los tomas en tus manos y los elevas el placer será más intenso.
5 Para terminar
Al acabar un encuentro apasionado puede que sus testículos estén ligeramente sobrecalentados y puedan estar sensibles y con un poco de dolor. Para aliviar esta pequeña molestia, ten un vaso de agua fría sobre la mesita de noche, y cuando ambos lleguen al orgasmo, toma un sorbo, sosteniendo el agua en tu boca por un rato antes de tragarla para refrescar la boca. Inmediatamente después, toma los testículos entro tus labios, uno a la vez, así el frío le dará una sensación extraordinaria, de alivio y excitación, preparándose para una potencial segunda ronda.
Fuente: Cosmopolitan