A pesar de que vivimos en una sociedad global y multicultural, lamentablemente es común que surjan manifestaciones de discriminación racial y hostilidad hacia las personas extranjeras debido a la xenofobia que parece sigue estando muy arraigada en la mentalidad de alguna gente.
El recelo y el rechazo abierto hacia aquellos individuos que no pertenecen a nuestro grupo es, después de todo, un comportamiento universal y heredado a través de generaciones. No se trata sólo de racismo o rechazo étnico, sino también de la desconfianza que despiertan las personas que no comparten nuestras creencias religiosas, costumbres, o ideologías de crianza.
Sin embargo, debemos ser conscientes que en orden de evolucionar como humanidad, este tipo de conductas prejuiciosas deben ser desechadas, pues cada vez tienen menos cabida en un mundo que exige más tolerancia, inclusión y empatía en lugar de discursos ignorantes de odio y rechazo.
Como muestra de esto, cada vez surgen más campañas promoviendo los valores positivos que deberían regir nuestro comportamiento diario por encima de actitudes retrógradas que sólo nos roban la oportunidad de crecer no sólo como individuos, sino como sociedad. Un ejemplo de dichas campañas es este vídeo lanzado por Federación SOS Racismo, organización que lucha contra las distintas manifestaciones del racismo y xenofobia en España.
‘Realizamos un experimento social. Un actriz invita a personas de la calle a participar en un sorteo ficticio. En el transcurso, otra actriz interviene y se desencadena una discriminación islamófoba. El experimento se repitió 23 veces. Intervinieron 42 personas. Algunas se callaron, otras apoyaron a la agresora, pero la mayoría defendió a la víctima.’ se lee en la descripción del video. Y es justo la última frase de dicha descripción la que nos da un poco de esperanza en las nuevas generaciones, que con algo de suerte (y mucha educación) ya no tendrán que cargar con lastres mentales como la xenofobia.