La Rioja no es sólo llano, vid y vino. Es una tierra de contrastes que muestra sus matices en el valle del Iregua, el río que cruza el Camero Nuevo. La carretera sube de la vega del Ebro entre espesos hayedos y robledales y las masas oscuras de acebos, encinas y tejos hasta pasar Villanueva. Luego se bifurca y culmina en los puertos de Piqueras y Santa Inés, ya en el límite con las tierras sorianas en el Parque Natural de la Sierra de Cebollera.El Parque de la Sierra de Cebollera tiene una extensión de 23.640 hectáreas e incluye los municipios de Villoslada de Cameros y Lumbreras y las aldeas de San Andrés y El Horcajo, con una población de 500 habitantes.Es un enclave geológico privilegiado dentro del Sistema Ibérico que destaca por las formaciones glaciares también conocidas como hoyos; concretamente en Hoyos de Iregua nace el río que da nombre al valle y por la altitud de unas cimas que superan los 2.000 metros. Las altura más destacada de la sierra con subida larga y exigente es La Mesa de Cebollera (2.168 metros).Se trata de un paisaje que ha recuperado los bosques. Por debajo de la alta montaña, donde hace cien años había prado, se extienden espesos arbolados naturales de pino autóctono, haya y roble rebollo. Nada queda de actividad intensa de la trashumancia.Hace dos siglos se llegaron a contabilizar más de cien mil ovejas que surtían de lana fina las fábricas de paños y bayetas y que fueron remodelando la montaña hasta convertir los altos en un inmenso pastizal.Camino de PiquerasSegún la creencia común, Villoslada de Cameros tenía en el siglo XVIII la mayor renta de Europa. Poco queda de aquel esplendor. El pueblo ha recuperado su pujanza y las casonas han sido reconstruidas gracias al tirón de la ganadería, la madera y el turismo, pero la industria textil es historia.Testimonio de aquella riqueza son las ruinas de la fábrica de paños que se pueden ver a orilla del río Iregua. La Posada Hoyos de Iregua ofrece alojamiento (45/50 euros) y un buen restaurante. Organiza senderismo y paseos a caballo (Tel. 941468256).Villoslada es punto de partida para visitar Lomos de Orio (cuatro horas ida y vuelta a pie) y el circo glaciar de Hoyos de Iregua, entre otros paseos.Lumbreras es el pueblo más alto del valle. Junto con Villoslada y Ortigosa fue donado por Enrique de Trastamara a Pedro Manrique de Lara en 1336 por su ayuda contra el rey Pedro I El Cruel. Casi se arruinó con la desaparición de la trashumancia.Ofrece al visitante un bello casco urbano, bosques, prados y un clima ideal. Alojamiento en Casa Isabel (Tels. 941468088 y 679830248, 40 euros) y la casa rural Casa Arca de alquiler completo (Tels. 941228074 y 689589023). Camino del puerto, en el kilómetro 273 se encuentra la Venta de Piqueras (Tels. 941468144 y 670226465) con hotel, restaurante y también un albergue (12 euros).Qué visitar- CIT de la Naturaleza. Villoslada de Cameros. Lunes cerrado. Martes, miércoles, jueves y domingo, de 10 a 14. Viernes, sábado y festivos, 10 a 14 y 17 a 19 (Tel. 941468216).- Centro de la Trashumancia. Subida a Puerto Piqueras (ramal de N-111). Abierto fines semana y festivos, 12 a 18 (Tel. 941468216).- Oficina de Turismo de Cameros. El Hórreo de Pradillo. Abierta todo el año, lunes a domingo de 10 a 14 (martes cerrado). Puentes, festivos y Semana Santa también de 14:30 a 19:30 (Tel. 941462151).