Agua, el peor enemigo de tu piel, esta es la razón
Así como lo lees, así como el agua puede ser tu mejor aliado también puede convertirse en tu peor enemigo
Y no nos referimos al agua que bebes, esa es mágica, 2 litros de agua al día tienen sorprendentes beneficios; más bien hablamos de lo que ha pasado con el agua en la última década. Podría ser el peor enemigo de tu piel.
Thorsten Wagener, profesor de Ingeniería de Agua y Medio Ambiente de la Universidad de Bristol, dice que la calidad de ella en el Reino Unido está entre las más altas del mundo. ¿Y en México?
Para empezar, existe una capa de suciedad en el cabezal de nuestras regaderas, que sin duda no apareció de la nada. (¡Qué asco!).
Y no es que el agua (pura) sea tu mayor enemigo, al lavar con cal, cloro y metales pesados contribuimos a este problema.
Los materiales a través de los cuales “filtramos” el agua pueden dejar depósitos que cambian el pH de la piel y lastiman nuestra barrera dérmica, causando irritación y dolor en la piel. El agua ya no es tan pura, el hierro, zinc, cobre y el níquel la están contaminando.
El agua termal o el agua de manantial son otro cuento. Éstas vienen desde lo profundo de la tierra y por ello no tienen bacterias o contaminación de ningún tipo.
Estos son algunos puntos importantes cuando de agua se trata:
- Cuando se evapora, también lo hacen tus aceites naturales, dejando tu cutis vulnerable a la contaminación, los radicales libres y la radiación UV. No así con el agua potable.
- La calidad del agua varía dependiendo la región, pero generalmente la calidad es mucho mejor en oeste, en el norte y en el sur que en el centro. El riesgo de entrar en contacto con medicinas y hormonas por medio del grifo de agua es, sin duda, altísimo.
- Malos hábitos. En 2025, dos terceras partes de la población del mundo pueden correr el riesgo de tener escasez de agua.