Llegó desde Brasil como una técnica capaz de nutrir, reconstruir, alisar, desencrespar y dar brillo a todo tipo de cabello. El pelo rizado se transformaba en ondas y el ondulado se alisaba.El tratamiento de queratina consiste en un lavado con un producto de arrastre, tras lo que se seca el cabello con un producto líquido de queratina. Una vez seco, se pasa una plancha para alisarlo. El pelo debe estar sin lavar hasta 36 horas para poder disfrutar de un cabello suave y brillante.En sus inicios, este "alisado brasileño" utilizaba entre sus componentes el formaldehído, una sustancia peligrosa cuando se calienta y se transforma en calor, como sucede al pasar la plancha.Los tratamientos de queratina dieron un giro radical en Europa cuando, en diciembre de 2010, Francia emitió una recomendación de no utilizar varios de los productos más populares de queratina en este país y en España.Actualmente, el resultado de las fórmulas que utilizan los peluqueros sigue siendo espectacular. No sólo porque el pelo quede manejable y sin encrespamiento, sino porque se ahorra tiempo cada día a la hora de secarlo.También existen en el mercado numerosos productos con queratina que contienen la capacidad alisadora de los tratamientos profesionales. Son hidratantes, nutren la fibra capilar y evitan el engorroso encrespado.