Cuando el calor y el sol aprietan, el uso de un buen calzado, protección solar y una hidratación adecuada son fundamentales para mantener los pies en condiciones idóneas de salud e higiene. Ahí van algunos consejos.Debes evitar el uso de zapatillas gruesas, reforzadas con espuma o materiales similares, ya que recuecen en exceso el pie, lo mantienen encajonado y provocan un exceso de sudor que acaba macerando la piel. Tampoco es recomendable el uso de tacones altos, zapatos estrechos y en punta, ya que acaban dañando el pie y favoreciendo la aparición de durezas y juanetes.Peeling natural
Si vas a pasar parte de tus vacaciones en la playa, ten presente los beneficios del agua salada del mar. El golpe de las olas al caminar favorece la circulación sanguínea, y además actúa como "peeling" e hidromasaje naturales. Por otra parte el agua del mar elimina las células muertas, regenera la piel dañada, y ayuda a quitar las durezas.Finalmente no olvides aplicarte protección solar si vas a tenerlos expuestos. Protege también las plantas, ya que también pueden quemarse y no olvides aplicarte crema hidratante cuando salgas de la ducha. Lo ideal es exfoliar con gránulos de sílice o gel de espuma y aplicar cremas humectantes al menos una vez a la semana.
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