¡Oh, no! El paño facial…¿por qué a mí? Aquí unos consejos útiles

El paño facial o clínicamente llamado melasma es un tipo de hiperpigmentación que ocurre en las mujeres, especialmente durante y después del embarazo.

Son grandes manchas oscuras sobre la cara, aunque también pueden afectarse otras partes del cuerpo expuestas al sol como los antebrazos.

La melanina es el pigmento que define el color de los ojos, el cabello y la piel de una persona. La producción de melanina puede afectarse por factores internos y externos, como la exposición al sol, la genética, los cambios hormonales (durante o posterior al embarazo), la inflamación y la edad.

La hiperproducción da lugar a hiperpigmentación, en la que aparecen manchas oscuras y tonos disparejos.
Aunque no es doloroso, sí afecta la autoestima de la mujer.

En el mercado existen diversos tratamientos clínicos y cosméticos para combatir el oscurecimiento de la piel. Si tu presupuesto te lo permite acude con un profesional.

Otra opción son las mascarillas que tu misma puedes preparar:

Mezcla dos cucharadas de leche en polvo, 4 cucharadas de miel de abeja y 2 cucharadas de zumo de limón hasta formar una pasta homogénea.

Úntala en la cara y deja que actúe unos 20 minutos. Lava y aplica una capa de yogur natural. Deja actuar 10 minutos más y aclara.

Otra opción es la loción blanqueadora, para esto tienes que conseguir 2 cucharadas de jugo de limón, 4 cucharadas de vinagre de sidra de manzana, ½ taza de agua, un manojo de perejil.

Hierve la ½ taza de agua y prepara una infusión con las hojas de perejil. Deja reposar y luego agrégale el vinagre y el jugo de limón. Guárdala en un atomizador y aplica sobre la mancha todas las noches antes de ir a la cama.

Con estos consejos verás que tendrás mejoras y recuperarás la belleza de tu piel. ¡Inténtalo! Y dile adiós al paño facial.