¿Quieres bajar de peso? Sólo necesitas perejil y limón
Bajar de peso en realidad nunca había sido tan fácil, pues la receta que te vamos a compartir más adelante sólo necesita dos ingredientes que seguramente tienes en tu nevera, es decir limón y perejil.
El perejil, además de ser un ingrediente perfecto que se lleva con la mayoría de los platillos, aporta múltiples beneficios a tu salud, como purificar órganos vitales, controlar la hipertensión y ser un agente antioxidante. Contiene minerales como calcio, hierro, fósforo y azufre. Por lo que es también ideal para personas propensas a padecer anemia, o aquellas que tienen osteoporosis. Por si fuera poco, al ser antioxidante nos ayuda a rejuvenecer nuestra piel, fortalecer las uñas y el cabello, además de bajar de peso.
Por otro lado, el limón como bien sabes, es uno de los elementos esenciales a la hora de nuestra rutina de belleza, ya que al combinar su jugo con azúcar o miel se convierte en un exfoliante natural. El limón también trae a nuestra salud beneficios como curar resfriados, limpiar nuestros intestinos, equilibrar nuestro PH, entre muchos otros.
Entonces imagina cómo vas a consentir a tu cuerpo interna y externamente cuando prepares la siguiente receta de agua de perejil y limón. ¿Estás lista para bajar de peso?
Ingredientes:
- 30 gramos o 3 cucharaditas de hojas de perejil
- 4 tazas de agua hirviendo
- Limón
Añade las hojas de perejil al agua hirviendo y deja reposar. Una vez que esté fría agrega el jugo de un limón. Este último ingrediente te va a servir como un detox para tus riñones, pues eliminarás toxinas.
Es muy importante que bebas esta agua antes de comer, para evitar inflamación y gases intestinales. Aquí te compartimos los hábitos que debes abandonar para evitar los gases intestinales.
Para que notes mejores resultados al bajar de peso con esta agua, debes tomarla por las mañanas media hora antes del desayuno y continuar durante 5 días. Haz un descanso de 10 días e inténtalo de nuevo.
Si estás embarazada lo mejor es que evites beber esta agua, ya que al poner a trabajar al intestino te podría provocar contracciones innecesarias.