El príncipe Harry, hijo de la fallecida princesa Diana y de Carlos, príncipe de Gales, contraerá nupcias con su novia, la actriz Meghan Markle, en 2018.
Clarence House, la residencia oficial del príncipe de Gales, dio a conocer que la boda del príncipe Harry tendrá lugar en la primavera de 2018.
“Su alteza Real el príncipe de Gales está muy contento de anunciar el compromiso del príncipe Harry con la señorita Meghan Markle”, señaló el comunicado.
El quinto en línea de sucesión al trono británico mantuvo un romance con Meghan Markle en secreto durante varios meses, hasta que rompió con las especulaciones en noviembre de 2016 cuando condenó los ataques contra su novia en redes sociales.
Harry, de 33 años, y Meghan, de 36, se conocieron en mayo de 2016 en Canadá, cuando él promocionaba en Toronto los Juegos Invictus, en los que participan militares veteranos.
La actriz hace el papel de Rachel Zane en la serie de televisión Suits. Una de las primeras medidas que tomará tras las boda será mudarse a Londres, donde vivirá con el príncipe en Nottingham Cottage en el Palacio de Kensington.
Meghan Markle creció en California, Estados Unidos y durante varios años residió en Toronto, mientras filmaba Suits.
Su religión católica no es un impedimento para casarse con el príncipe Harry, ya que la nueva ley de sucesión de 2015 permite a los miembros de la familia real contraer nupcias con personas de la iglesia católica.
Los padres de la actriz, Thomas Markle y Doria Ragland también felicitaron a la pareja a través de redes sociales:
“Estamos increíblemente felices por Meghan y Harry. Verla unida a Harry, que comparte con ella las mismas cualidades, es una gran satisfacción para nosotros como padres”, dijeron.