El ayuno intermitente es un hábito que imita las costumbres alimenticias de nuestros ancestros, quienes tenían que enfrentarse a ciclos de abundante alimento y de hambruna, así que realizarlo simplemente significa tomar una decisión consciente de saltarte ciertas comidas.
Se ha visto que parte del proceso de las enfermedades es que estamos comiendo muy frecuentemente, ocasionando que nuestro cuerpo no tenga el tiempo suficiente para repararse naturalmente. Al estar en ayuno, tu cuerpo no tiene alimento para utilizar como energía, por lo que comienza a obtenerla de la grasa acumulada en vez de la glucosa almacenada en tu cuerpo. Cuando se rompe el ayuno, nuestro cuerpo tiene mayor sensibilidad a la insulina por lo que utiliza mejor los alimentos que consumimos almacenando la mayoría como glucógeno y solo lo mínimo como grasa.
Practicar el ayuno intermitente brinda múltiples beneficios, entre los que se encuentran:
- Normalizar la sensibilidad de insulina y leptina
- Aumenta la quema de grasa
- Aumenta músculo
- Regula niveles de glucosa
- Aumenta la producción de hormona del crecimiento
- Disminuye niveles de triglicéridos, colesterol LDL y aumenta HDL
- Disminuye estrés oxidativo: disminuye la acumulación de radicales libres en la célula
- Disminuye presión arterial
- Aumenta protección contra enfermedades neuro degenerativas: debido a que un producto de la quema de grasa son las cetonas y estás son en realidad el combustible preferido para tu cerebro
- Ayuda a utilizar mejor los alimentos que consumes
Existen diferentes planes para llevar a cabo el ayuno intermitente,y el mejor es el que se adapta más a tu vida y con el que te sientas más cómoda. Antes de elegir un tipo de ayuno, comienza poco a poco con un periodo de dos semanas de adaptación, en el que puedes tener síntomas como baja energía, mareos, dolores de cabeza, antojos y hambre. Una vez pasando este periodo, tus síntomas mejorarán y te sorprenderás de que quedarás satisfecha con menos comida.
El ayuno intermitente en general te ayudará a sentirte más ligera, desinflamada, a quemar grasa, tener menos antojos y crear más músculo. Pero ojo, si padeces hipoglicemia o diabetes debes consultar con tu médico o nutriólogo antes de realizarlo.