“Una alimentación saludable debe favorecer el mantenimiento del peso corporal, la composición y el índice de masa corporal en niveles adecuados”, aseguran en las nuevas “Guías alimentarias para la población española”, dadas a conocer por los nutriólogos españoles esta semana.
Y para lograr este objetivo, modificaron la clásica pirámide alimentaria, agregando suplementos alimenticios y nada menos que una nueva base que, según ellos, se adapta mejor a las necesidades de hoy en día. Esta propuesta, realizada por más de 100 expertos y avalada por la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC), propone como base para una alimentación saludable estos cinco conceptos: -Actividad física diaria: Es importante que la población general realice diariamente al menos 60 minutos de actividad física “o su equivalente de 10.000 pasos al día”, explican en la guía, con periodos de mayor intensidad cuando sea necesario.
Equilibrio emocional: La salud mental está incluida entre los elementos fundamentales de una buena alimentación. Esto, debido a que, según el estado de ánimo, una persona varía su alimentación. “Cuando estoy deprimido o enfadado no me apetece cocinar, por lo que tomo una cosita rápida o algo al microondas”, dijo a La Vanguardia el presidente del comité científico de la SENC, Javier Aranceta. En la guía se menciona además la “alimentación consciente”, explicando que el “dedicar tiempo a la compra de los alimentos y a su cocinado, así como transmitir este conocimiento a los hijos a través de las comidas en familia, podrían ser los primeros pasos que hay que seguir para alcanzar la plena consciencia emocional en el proceso de alimentación”.
Balance energético: Con esto, los nutricionistas se refieren a “adaptar de manera cuantitativa y cualitativa la ingesta alimentaria al grado de actividad física y a la inversa”. Es decir, si se come más, se debe realizar más ejercicio; y si la actividad física es alta, se deben ingerir alimentos que apoyen y nutran al cuerpo de manera equilibrada.
Técnicas culinarias saludables: Las técnicas y utensilios utilizados al cocinar o conservar los alimentos podrían afectar la calidad nutricional de estos, señalan en la guía, “y contribuir a la posible transferencia de sustancias indeseables”. En el texto de los nutricionistas se explica que, en general, “el cocinado al vapor, las preparaciones seguras en crudo o las menos elaboradas ofertan mejor valor nutricional”. Ingesta adecuada de agua: Es importante incorporar diariamente la ingesta de agua, otros líquidos y alimentos, hasta completar alrededor de 2,5 litros, “que habría que aumentar de manera adecuada en caso de actividad física, aumento de la temperatura o humedad ambiental, fiebre o pérdida de líquidos”. Los suplementos y sus peligros En la cumbre de la pirámide, por sobre los dulces, pasteles y alimentos hechos a base de manteca, se agregaron los suplementos nutricionales como por ejemplo, hierro o vitamina D. En estos casos, se trata de una opción individual y que debe ser supervisada por profesionales. ¿Por qué incluirlos? “Hay casos como las mujeres en edad fértil, en los que es recomendable la suplementación (con ácido fólico, por ejemplo)”, dijo Aranceta, tal como informó El Mundo.
Sin embargo, comentó que “hay una gran cantidad de personas que toman de manera autónoma y sin consultar suplementos alimenticios y eso no debería hacerse”. Asimismo, Aranceta advirtió sobre los peligros que podrían existir si se combinan estos productos con fármacos recetados. “Nuestro consejo es siempre consultar con un profesional de la salud antes de tomar un suplemento”.