Las celebrities han demostrado que los brillos, metales y lentejuelas nunca pasan de moda, aunque hay que decir que no a todo el mundo le favorecen, y que hay que saber combinarlos y saberlos llevar. Un ejemplo de saber llegar con elegancia un vestido metalizado es el de Heidi Klum que se presentó, a una fiesta de Elton John, así de explosiva junto a su marido, cual guerrera y reina del pop con un escueto diseño que con sus largas piernas le quedaba de miedo.