El negocio de las falsificaciones logró unas cotas casi históricas en el 2008. La Policía
Nacional y la Guardia Civil intervinieron el pasado año mercancías por valor de 385 millones de euros y se incautaron 7,5 millones de falsificaciones.Un bolso de una marca como Loewe o Gucci, que oscila entre los 300 y 1500 euros baja en un punto de venta ilegal hasta los 50 u 80euros. Por eso, los grandes demandantes de las falsificaciones son los sectores de clase media-baja, que no pueden adquirir este tipo de productos por otra vía.Las marcas colaboran estrechamente con las autoridades para localizar las falsificaciones aunque el trabajo de interceptación lo realizan las aduanas.