El donostiarra Miguel Palacio presentó una colección fundamentada en vestidos que se recogen en la cintura con grandes cinturones y llevan unos cortes con forma de capa trasera. Hombros marcados, solapas que se unen al bolsillo en algunas chaquetas de esmerado corte, faldas cortas en piqué de seda se sucedieron en un larga colección en colores que van de los más neutros, rosa, azul marino, y algún rojo.