Lo que ellos odian escuchar en la cama
Por ejemplo, cuando no estamos dispuestas, inventamos una serie de pretextos para decirles a ellos un "no quiero", pero disfrazado.
Aunque ellos parecen estar siempre listos sin importar las circunstancias o el lugar pero ¡ojo! no todo lo que les dices les parece sexy. Esto es lo que ellos odian escuchar en la cama.
Cuando no estamos dispuestas, inventamos una serie de pretextos para decirles a ellos un “no quiero”, pero disfrazado.
Hay ciertas preguntas que pueden matar la libido en un dos por tres. Esto es lo que ellos odian escuchar en la cama:
- ¿Ya está adentro? Adiós autoestima. Le hace pensar que se siente exactamente igual si su miembro está dentro o fuera de ti.
- Me duele la cabeza. Él ya sabe que no te duele la cabeza, es mejor que seas clara y le digas “hoy no”.
- Estoy en mis días. Aunque es completamente comprensible que decidas no tener sexo mientras vives tu periodo, él sencillamente siente que lo estás “bateando” (y sí).
- No lo compares. Ellos prefieren no saberlo todo porque si se los dices se sentirán más presionados para ser mejores que él.
- ¿Estoy gorda? No, claro que no. No le importa y menos en “ese” momento. Esta pregunta los pone en aprietos. Si tienes unos kilos de más y te lo dicen, puedes ofenderte y molestarte con ellos, si no lo hacen, no confiarás en ellos.
- No está tan chiquito. El problema está en el “tan”. Si su amigo es pequeño, no lastimes su ego, él ya lo sabe.
- ¿Cuántos hijos quieres tener? A menos que ya hayan dejado claro que tienen planes de formar una familia juntos, nunca se lo digas (y menos en la cama).
- No terminé. Tragedia griega. El orgasmo es de quien lo trabaja. Háblalo pero no en la cama. o mejor en este caso es expresar lo que te gusta en la cama (de forma sutil). Nunca mientas o finjas.
Y, por supuesto, punto y aparte “¿Eso fue todo?”, si no quieres una respuesta grosera o matar su autoestima (por los siglos de los siglos), guárdate tus comentarios.