El director de la Unidad de Investigación Social, Epidemiológica y en Servicios de Salud (UISESS) del IMSS en Jalisco, Javier García de Alba García, afirmó que la práctica periódica de ejercicio hace más saludable a cualquier persona.
Entendida como un mínimo de 30 minutos de actividad al día, promueve la formación de receptores musculares de insulina, los cuales constituyen importantes mecanismos para evitar que la glucosa se acumule en sangre traduciéndose en diabetes e incluso en hipertensión, señaló.
El investigador del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco destacó que el proceso de hiperglucemia y en la hipertensión son paulatinos y se asocian a estilos de vida no saludables, en especial al sedentarismo.
Detalló que con el ejercicio continuo puede tener muchos beneficios, como una mejor circulación sanguínea, optimizando en consecuencia la oxigenación orgánica lo cual hace que los músculos formen más receptores de insulina.
Todos nacemos con esos receptores de insulina pero como cualquier órgano, si no se usa, se atrofia, en la medida en que los usemos, se generan más; los atletas tienen muchos receptores de insulina abiertos, por lo tanto luego de hacer un esfuerzo gigantesco algunos pueden quedar en hipoglucemia por toman azúcares, dijo.
Aseguró que si hacemos ejercicio abrimos esos receptores y entonces la insulina que produce el páncreas puede entrar perfectamente bien, se cierra el receptor y se descarga ahí dentro de manera que el azúcar que hayamos consumido no se sale a la sangre.
Indicó que cualquier ejercicio es bueno, siempre y cuando se haga de manera organizada en tres periodos de 10 minutos cada uno distribuidos en calentamiento, trabajo intenso con incremento del ritmo cardíaco y sudoración y finalmente relajación.
En este punto, el experto se refirió muy en específico al periodo de trabajo intenso el cual si bien incrementa el ritmo cardíaco: No debe cortarnos el aliento, si eso sucede estamos forzando demasiado al corazón, lo cual acarreará efectos adversos.
Recomendó practicar ejercicio por lo menos tres veces por semana y procurar que sea en el orden ya descrito: “Despacio, rápido y despacio, sudando respirando fuerte pero sin perder el aliento, esa es la clave para que el corazón no se desboque ni se extenúe y se reduzca el riesgo a padecer diabetes e hipertensión”.