A la hora de elegir tu ropa interior debes fijarte en algo más que las apariencias, pues aunque hay muchísima ropa interior hermosa por fuera, hay algunas que pueden causar daños a nuestro cuerpo, como infecciones o mínimo irritaciones que si bien no son taaan graves para la salud, vaya que incomodan.
Esto depende mucho del material con el que estén hechas, por ejemplo, aquellas prendas que están confeccionadas con poliéster pueden provocar alergias, irritaciones y hasta resequedad vaginal. Principalmente porque este material provoca sudoración excesiva y pues bueno, sabemos que el sudor y la mala ventilación no son buenos aliados.
Por eso, cuando sea momento de elegir lencería elige aquella que está hecha únicamente con algodón, pues este material es el único que favorece la circulación del aire en tus partes íntimas.
Otro punto que no debes dejar pasar son los inconvenientes de usar ropa interior ajustada. Por más linda que se vea no es tan buena idea llevar un calzón que no te deje ni respirar.
Primero, por el tema de la comodidad, la ropa demasiado ajustada no te permitirá realizar actividades que normalmente harías y también porque la lencería demasiado entallada puede marcar tu piel y hasta provocarte problemas de circulación, que en un futuro podría provocar varices. Por eso lo mejor es buscar el equilibrio entre la belleza y la comodidad.
Sí, una lencería sexy siempre nos hará sentir en confianza con nosotras mismas sin importar si será una noche de pasión o simplemente nos acostaremos en la cama a mirar películas hasta quedarnos dormidas, lo importante es que te sientas cómoda contigo misma.