La falta de ejercicios se ha convertido en uno de los principales factores de riesgo para el desarrollo de enfermedades crónicas y mortales como cáncer, diabetes y accidentes vasculares, aseguró la investigadora de la Harvard Medical School y de la Harvard School of Public Health, I-Min Lee.
En la inauguración del Quinto Congreso Internacional de Actividad Física y Salud Pública que se desarrollará en esta ciudad, señaló que cada año se registran cerca de cinco millones de muertes atribuibles a problemas desencadenados por la inactividad física.
La científica originaria de Malasia enfatizó que de acuerdo con diversas investigaciones, entre el 6 y el 10 por ciento de la ocurrencia de casos de enfermedades crónicas tienen su origen en la falta de ejercicio.
Y es que de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud, al menos 31 por ciento de la población mundial no realiza el mínimo de actividad física necesaria para conservar una buena salud, es decir al menos 30 minutos de actividad moderada por cinco días a la semana.
De acuerdo con diversas fórmulas que la doctora Lee explicó a los asistentes, las estimaciones de la afectación que tiene la falta de ejercicio en la salud pública, refiere un impacto muy amplio, incluso considerando que no existen datos precisos en muchos países.
Explicó que con base en datos estadísticos y otras fuentes de información se hizo una proyección del riesgo relativo entre personas que realizan actividad física y aquellas que no hacen ninguna actividad para evaluar qué tan propensos son de desarrollar alguna enfermedad crónica.
El resultado fue preocupante, pues del 6 al 10 por ciento de las principales enfermedades crónicas en el mundo se pueden atribuir directamente a la inactividad física.
Si pudiéramos por un momento eliminar toda la inactividad física en el mundo y que la gente se activara podríamos evitar cerca de 5.3 millones de muertes en un año, refirió Lee.
La especialista consideró que si los gobiernos y las organizaciones sociales impulsan políticas públicas a favor del ejercicio la expectativa de vida en todo el mundo podría crecer casi un año más en términos generales; y a nivel individual se pueden lograr incrementos en esta misma expectativa de 2 y 4 años de vida dependiendo del tipo de actividad física.
La inactividad física es tan peligrosa como el tabaquismo y la obesidad como generadora de enfermedades no transmisibles. Ser inactivo incrementa tu riesgo de muerte prematura 27 por ciento, refirió Lee.
Finalmente, puntualizó que es necesario profundizar en los estudios sobre el nivel de ejercicio que hay en cada país, así como una medición más realista de los niveles de actividad, no sólo activo e inactivo, para tomar mejores decisiones.
Antes, durante la ceremonia de inauguración, Pedro Curi Hallal, presidente del Comité Científico del Congreso celebró la participación de expertos de todo el mundo, incluyendo delegaciones de China, India y Rusia, los países con mayor población y extensión territorial, en los que las políticas públicas efectivas podrían tener un impacto mucho mayor.