Muchas veces el éxito de las parejas se basa en tener los mismos gustos, pero qué pasa cuando éste es la bebida. La mayoría pensarían que el beber demasiado alcohol podría afectar a la relación, pero de un reciente estudio demostró todo lo contrario.
De acuerdo con el estudio realizado por The Journals of Gerontology Series B: Psychological Series las parejas que están acostumbradas a beber juntas duran mucho más que las que no, o sea que una beba y la otra no, esto puede causar hasta que se termine la relación.
Y es que se analizaron a 2,767 parejas en promedio de 33 años, de las cuales se determinó que cuando el hombre es el único que bebe (o bebé más) la mujer es la más afectada pues no toleran el comportamiento de su galán.
El 67% de las chicas revelaron que se sienten más tranquilas y seguras si acompañan a sus novios mientras que el 33% les prohíben que salgan a beber solos, esto genera problemas.
Sin embargo, el hecho de que ambos beban juntos no significa que es algo que deba hacerse tan seguido, claro todo debe ser con moderación y no se trata de que los dos se emborrachen, pues tienen que cuidarse.